
No sé si te lo has planteado pero… no hay galletas saludables en el mercado.
La galleta es un artículo absolutamente habitual en cualquier casa, y ahora mismo en el mercado tienes dos grandes grupos: las que están enfocadas en captar la atención de los niños, con cajas llenas de color, dibujos o incluso regalos, y las que van dirigidas a los que se preocupan de su salud y entonces tienen mucho icono verde, dibujos de hojas y palabras resaltadas como “0% azúcar”, “light”, “natural”, “casera” … da igual cuál elijas, siento decirte que ninguna es de verdad saludable.
Y la única forma de comer una galleta saludable (porque sí puede serlo) es controlando tú los ingredientes, haciéndolas en casa. Endulzando con frutas frescas o deshidratadas, añadiendo alimentos integrales… Esta que te traigo hoy, es una receta que cumple con todos los requisitos, es deliciosa, saciante, sin azúcar añadido, con grasas saludables y un extra de proteína. ¿Qué más le pedimos a una galleta? ah claro, que sea fácil y rápida de hacer ¡pues también lo tiene!! Toma buena nota de la receta porque vas a querer hacerlas una y otra vez.
Espera !! también te digo una cosa, esta no es una galleta súper dulce, sobre todo si tu paladar está acostumbrado a la repostería industrial, y tiene todo el sabor del chocolate amargo. A mi me rechiflan así, pero tenlo en cuenta por si quieres añadir más sirope de dátil (o algún otro endulzante).

Ingredientes para 10 unidades:
- 1 plátano bien maduro
- 1 cda crema de cacahuete
- 1 cda cacao puro en polvo
- 1 cda crema casera de dátil
- 1/2 cdta jengibre en polvo
- 1/2 taza copos de avena
- 30 gr proteína aislada de guisante
Elaboración
- Empieza aplastando el plátano con un tenedor, añade la crema de cacahuete y la crema de dátil y remueve bien.
- Vamos con los sólidos, añade a tu mezcla el jengibre, el cacao y la proteína (yo he usado de guisante de sabor neutro, pero puedes usar la que quieras). Remueve bien e integra.
- Añade los copos de avena (si quieres una textura más fina, muélelos primero), mezcla con el tenedor hasta que se haga difícil y continua después con las manos, hasta tener una bola de masa densa, que se trabaja bien sin que se pegue. Es como jugar con barro, ¿recuerdas la película Ghost?
- Precalienta el horno a 180º
- Divide la masa en 10 bolas y aplástalas una a una con el grueso que tú quieras, yo las he dejado como de 1/2 cm más o menos. Si quieres, hazle algún dibujo con un tenedor, o simplemente déjala lisa. Yo usé un sello de silicona con las palabras “Home made” por hacer una gracia.
- Ponlas sobre un papel de hornear en la bandeja del horno, y cocínalas durante 15 minutos. Deja enfriar completamente antes de guardarlas.
Estas galletas son fantásticas, ya me contarás cuando las hagas, se quedan druidas por fuera y más blandas por dentro (aunque esto también puede variar según el grosor final) y te pueden apetecer en cualquier momento, para merendar, en un desayuno, con el café de la tarde… pero te voy a decir una cosa, por muy saludables que las hagamos, desde el punto de vista nutricional no deberían estar a diario en nuestra dieta, porque probablemente están desplazando otros alimentos (como la fruta) que sí son necesarios por sus vitaminas y minerales. Es por eso que yo no las tengo normalmente en casa, no hago grandes cantidades, ni te lo aconsejo, si un día me apetecen las preparo, ya ves que no tardarás más de 25 minutos en tenerlas listas, pero sí trato de que el frutero esté siempre lleno y también de tener botes con frutos secos.
Dulces saludables SI, pero de forma puntual !!

Escrito por: Beba
Cocinar es de Guapas – Octubre 2020